domingo, 12 de marzo de 2023

 

BALANCE CARNAVALERO

 


Previo al juicio de un jurado con el cual puedo estar de acuerdo o no, paso a comentar aspectos del carnaval que pude apreciar este año en el teatro de verano.

Voy, primero, por lo negativo. Los responsables de la IMM y del departamento cultural están prometiendo una mejora en las instalaciones. Me parece muy bien, si se cumplen en forma ordenada y con beneficios para el público asistente. Por el momento, hay dos aspectos que no se contemplan de ninguna  manera:

1) El aturdidor sonido altísimo, con grandes desgastes que producen demoras de más de 50 minutos. En esta liguilla, hubo dos ocasiones en que se produjo una demora que acalambró a los ya desgraciados que esperábamos la continuación del espectáculo.

 

2) La tirada de papelitos, a cada rato, de manera sorpresiva, más que una diversión constituye una manifiesta  molestia para los desgraciados de la platea baja. Esas tiradas, se hacen con unas máquinas que sorpresivamente, irrumpen y tiran. Uno puede estar comiendo una muzzarella y en unos pocos segundos la muzza se tiñe de papeles que se pegotean con el queso y no hay con qué darle después. Es probable que el efecto visual por la tv sea agradable pero para los asistentes constituyen una verdadera tortura. Por otra parte, no agregan nada al espectáculo que se está dando. Para nada. Y, además, constituyen un soberano gasto al pedo.

 

3) En cuanto a los espectáculos: si bien es cierto que el gobierno no está haciendo todo lo que podría o debería hacer, también es cierto que anteriormente tampoco se hizo. De lo contrario no hubieran perdido el poder político. Si lo perdieron, –y así fue–, lo que deberían hacer, además de la crítica que debería ser constructiva y no tan cargada de odio como la que hacen CASI  TODOS los conjuntos, habría otro cantar, más  acorde y con menos carga de congoja y rencor. Ayer, uno de los componentes de un conjunto bajó a saludar al presidente del Frente Amplio; y dijo algo que es verdad: “esto parece un comité de base”. Y sí, eso es lo que parece, porque apenas se vislumbra alguna autoridad del Frente, el teatro se pone de pie. No hay nadie que no siga la consigna cargada de odio y rencor que se percibe por todos lados.

 

En los aspectos musicales y escenográficos, creo que hay una excelente calidad llevada a cabo con grandes sacrificios. El que se dedica al carnaval no es un privilegiado de clase alta que pone lo que le sobra para sacar a su grupo, sino un ser con una locura especial que lo hace salir aunque tenga que sacrificarse el resto del año para pucherear.

No tengo juicio definido en todos los rubros, pero voy a comentar los que me parecieron los mejores.

 

En NEGROS Y LUBOLOS: Hay dos comparsas que se llevaron mis aplausos:

VALORES: El espectáculo lleva el nombre de “Entre”. El tema de actualidad, no es común en la categoría. La línea argumental nos lleva a un reino, donde el príncipe presenta ambigüedad sexual: nació varón, pero tiene dudas, (y por eso el nombre “entre”) sobre qué es, realmente: ¿varón o niña? ¿Y si no es ninguno de los dos? ¿Y si se queda, así en esa ambigüedad, será un “elle”? ¿Cómo saberlo realmente? ¿Hay formas o maneras de detectarlo? El Rey —de personalidad tradicional— ¿aceptará a un hijo/hija “elle”? ¿Qué otros cambios deberán producirse para lograr esa aceptación? Vale la pena ver el espectáculo, aunque no se tenga la cabeza para aceptarlo así como así.

 

C 1080  Es un espectáculo que respeta los cánones de las comparsas. Se titula: Madraza.  El comparsero encarnado por Nacho Cardozo, se lleva todos los aplausos: actúa, baila, canta, y  todo lo hace bien. También vale la pena verlo.

 

HUMORISTAS

El espectáculo que más me gustó es el que ofrecieron “Los rollin” con un personaje Virgilio que resultaba muy cómico. A cada momento decía: “!Humoristas!” porque evidentemente, quizás no lo fueron totalmente en alguna secuencia. A mí me parecieron muy buenos. Pero no fueron los ganadores. Lamentablemente.

 

REVISTAS

De desempeño parejo, se quedó con el primer premio la que tenía mejor espectáculo desde el punto de vista técnico. No más de eso, porque todas estaban bien.

Como balance, ya señalé que fue negativo el sonido- demasiado alto—tuve  que llevar tapones para los oídos todas las noches— y, la mugre producida por los famosos “papelitos” a los que les agregaron unas serpentinas plásticas que tampoco agregaban nada positivo.

Es de esperar que en el futuro, se hagan los espectáculos con menos agresividad para los pareceres que son diferentes y,  con más tolerancia para los que tienen otra modalidad.

 

 

 

 

 

  “VIEJO BARRIO QUE TE VAS ”   Desde que vivo en Punta Carretas, el barrio se fue transformando en forma lamentable. Hay construccione...